El masaje erótico es una oportunidad para un acercamiento íntimo cuerpo a cuerpo, conocer el cuerpo de tu pareja y lo que la estimula, despertar la sensualidad con tenues caricias. Además, es más estimulante comenzar el preámbulo sexual con un buen masaje.
La piel del ser humano posee una superficie de 18.000 cm2 y un millón y medio de receptores. Se puede decir que la superficie corporal, la piel, es el órgano sensorial más extenso del cuerpo humano.
Aplicar un masaje erótico provee de creatividad a la relación sexual, lo cual permite romper con la monotonía, y ofrecer a la relación ideas románticas o perversas, sea el caso de los participantes, lo cual auguran un buen sexo.
El masaje erótico aumenta el deseo de la pareja por tener sexo, a través del estímulo de las zonas erógenas ideales para concebir un orgasmo o varios.
Al ofrecerle un masaje a tu pareja o ser el objeto estimulado, mejora la irrigación sanguínea a la zona masajeada: Lo cual ayuda a que la piel y otras partes del cuerpo sean más receptivas a los estímulos.
Un buen masaje erótico, no sólo relaja y permite dejar de lado los problemas y el estrés para vivir un excitante momento íntimo; prepara a la pareja para un encuentro sexual, al ser el masaje un estimulo prolongado.
Al masajear la temperatura corporal aumenta, mejorando la circulación por la vasodilatación que provoca la fricción de los tejidos. Asimismo, aumenta niveles de oxígeno en sangre.
Con el masaje erótico no sólo se intenta relajar a la pareja, sino excitar por lo cual pasa por un proceso muy estrecho. Es bueno empezar de los pies hacia la cabeza, y con una intensidad media. Es importante probar con varios niveles de intensidad y estar atento a la receptividad de la persona que recibe el estímulo.
Al iniciar el masaje debes ser ordenado, no puedes pretender abarcar todo el cuerpo de una sola vez. Empieza con un pie, luego el otro, sigue con la pierna derecha y cuando termines masajea la izquierda. Continúa con los glúteos de la misma forma.
A la espalda la puedes acariciar empezando por la parte baja o bien, divídela en dos por la columna y acaricia uno de los lados primero. Con los brazos actúa igual que como hiciste con las piernas; no olvides las manos. Y deja por ultimo la cara. Aunque, cuando nos referimos al masaje en los genitales no se trata de una masturbación, aunque puede terminar en ello. En tal caso, procura dejarlo de último.
Recomendaciones:
Crea un ambiente romántico antes de empezar con el masaje. Coloca velas, incienso, música relajante.
Recuerda que al dar un masaje haz uso de todo tu cuerpo, palma, dorso de las manos y nudillos; dedos, labios, lengua, brazos, inclusive hasta tus pies! Se creativo. Puedes aprovechar el momento para acariciar a tu pareja con pétalos de flor, plumas, telas suaves! esto suele ser muy excitante.
Utiliza aceites neutros que no tengan un olor desagradable para la pareja y que no vayan a causar irritación de la piel, toma estas mismas precauciones si usas crema. Recuerda el roce suave o fuerte es esencial en el masaje erótico, ya que demuestra pasión y deseo.
fuente: http://site.metamaxzone.com/blogs/post_salud.html?post_id=264
La piel del ser humano posee una superficie de 18.000 cm2 y un millón y medio de receptores. Se puede decir que la superficie corporal, la piel, es el órgano sensorial más extenso del cuerpo humano.
Aplicar un masaje erótico provee de creatividad a la relación sexual, lo cual permite romper con la monotonía, y ofrecer a la relación ideas románticas o perversas, sea el caso de los participantes, lo cual auguran un buen sexo.
El masaje erótico aumenta el deseo de la pareja por tener sexo, a través del estímulo de las zonas erógenas ideales para concebir un orgasmo o varios.
Al ofrecerle un masaje a tu pareja o ser el objeto estimulado, mejora la irrigación sanguínea a la zona masajeada: Lo cual ayuda a que la piel y otras partes del cuerpo sean más receptivas a los estímulos.
Un buen masaje erótico, no sólo relaja y permite dejar de lado los problemas y el estrés para vivir un excitante momento íntimo; prepara a la pareja para un encuentro sexual, al ser el masaje un estimulo prolongado.
Al masajear la temperatura corporal aumenta, mejorando la circulación por la vasodilatación que provoca la fricción de los tejidos. Asimismo, aumenta niveles de oxígeno en sangre.
Con el masaje erótico no sólo se intenta relajar a la pareja, sino excitar por lo cual pasa por un proceso muy estrecho. Es bueno empezar de los pies hacia la cabeza, y con una intensidad media. Es importante probar con varios niveles de intensidad y estar atento a la receptividad de la persona que recibe el estímulo.
Al iniciar el masaje debes ser ordenado, no puedes pretender abarcar todo el cuerpo de una sola vez. Empieza con un pie, luego el otro, sigue con la pierna derecha y cuando termines masajea la izquierda. Continúa con los glúteos de la misma forma.
A la espalda la puedes acariciar empezando por la parte baja o bien, divídela en dos por la columna y acaricia uno de los lados primero. Con los brazos actúa igual que como hiciste con las piernas; no olvides las manos. Y deja por ultimo la cara. Aunque, cuando nos referimos al masaje en los genitales no se trata de una masturbación, aunque puede terminar en ello. En tal caso, procura dejarlo de último.
Recomendaciones:
Crea un ambiente romántico antes de empezar con el masaje. Coloca velas, incienso, música relajante.
Recuerda que al dar un masaje haz uso de todo tu cuerpo, palma, dorso de las manos y nudillos; dedos, labios, lengua, brazos, inclusive hasta tus pies! Se creativo. Puedes aprovechar el momento para acariciar a tu pareja con pétalos de flor, plumas, telas suaves! esto suele ser muy excitante.
Utiliza aceites neutros que no tengan un olor desagradable para la pareja y que no vayan a causar irritación de la piel, toma estas mismas precauciones si usas crema. Recuerda el roce suave o fuerte es esencial en el masaje erótico, ya que demuestra pasión y deseo.
fuente: http://site.metamaxzone.com/blogs/post_salud.html?post_id=264