El estrés no es bueno para nadie y menos para los bebés. Investigadores de la Universidad alemana de Konstanz han revelado que este tipo de tensión durante el embarazo aumenta las probabilidades de que el futuro bebé tenga desórdenes mentales de por vida. Pese a ello, los expertos sólo han estudiado el impacto causado por el abuso en la pareja y no por el estrés provocado por el trabajo u otros factores. Tal y como han indicado los científicos, los altos niveles de estrés sufridos por la madre durante la gestación pueden dar lugar a que el bebé tenga problemas mentales durante toda su vida.
Aseguran, según recoge el Daily Mail, que las mujeres que se someten a altos niveles de tensión pueden dejar una huella imborrable en el cerebro de los niños.
Los expertos analizaron el comportamiento y el nivel emocional de varias mujeres a las que se las sometió a un alto estrés por parte de sus maridos o parejas en el domicilio familiar y la respuesta de sus respectivos hijos de entre 9 y 19 años.
Así, se comprobó que el gen responsable de dar respuesta al estrés era mucho menos activo en los niños cuyas madres fueron víctimas de abuso doméstico.
Según una de las autoras del estudio, Helen Gunter, "se cambia la forma de responder al estrés ya que tienen una menor capacidad de respuesta".
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